Cuando se le pide imaginar una selva, estoy segura de que el último lugar que imaginaría es una selva en el norte de Francia. Más precisamente, en la ciudad portuaria de Calais, un enlace importante con el Reino Unido. Calais, hasta el pasado mes de octubre, fue el hogar de "La Selva", el nombre dado al campamento de migrantes y refugiados en el puerto de Calais, donde vivían unos 6.000 a 10.000 hombres, mujeres y niños que buscaban refugio. Se dice que el nombre de "La Selva" deriva de los migrantes y refugiados pastunes, que se refieren a él como "dzhangal" que se traduce en "bosque". El nombre también puede ser visto como una referencia a las terribles condiciones de vida, con poco acceso a las necesidades básicas, tales como agua potable y alimentos.

Desde 1991, el campo ha existido en varias formas. Fue originalmente creado por la Cruz Roja y conocido como "Campamento Sangatte", pero luego se trasladó debido a la superpoblación. En los últimos 15 años, la policía francesa ha intentado varias veces cerrarla, sin embargo nunca lo han conseguido, pues sus habitantes retornan poco después. Los refugiados e inmigrantes proceden de Irak, Irán, Siria, Afganistán y otros países devastados por la guerra que buscan una vida más segura para ellos y sus familias, y muchos ya tienen familia en Europa.

Al principio de 2016, el presidente francés François Hollande anunció que a finales de 2016 "La Selva" se cerraría definitivamente, y los refugiados se trasladarían a varios centros alrededor de Francia. Los motivos de Hollande para este anuncio han sido cuestionados, sugiriéndose que era una oferta para mantener el favor del público francés ahora que las elecciones 2017 son inminentes. Sin embargo, ¿qué significa esto para los aproximadamente 8.000 refugiados? Además, ¿qué significa esto para los niños refugiados sin padres en el campamento?

A finales de octubre de 2016, los refugiados fueron trasladados a uno de los 160 "Centros de Bienvenida y Orientación" (CAO) ubicados en toda Francia. Permanecerán en estos centros por hasta 4 meses, mientras que las autoridades investigan cada caso individual. Cada uno de los refugiados recibirá un período de tiempo determinado en el que deberá reclamar asilo francés, o será deportado a su país de origen.

Usted puede preguntarse por qué los refugiados no están demandando asilo en Francia en lugar de arriesgar sus vidas viajando para llegar al Reino Unido. La respuesta para ellos es que muchos de los refugiados ya tienen miembros de su familia en el Reino Unido y están tratando desesperadamente de reunirse con ellos, además que en el Reino Unido ven que tienen mejores beneficios para los que buscan refugio y por lo tanto mejores oportunidades en el futuro que Francia les pueden ofrecer.

Los miles de niños que se estima que viajan solos son el único grupo de refugiados que permanecerán en el campamento, trasladándose a diferentes alojamientos en el sitio. Esto se debe al temor por su seguridad si se trasladan con los refugiados adultos. Los niños no acompañados que buscan refugio son un enorme problema político y humanitario en toda Europa, con un estimado de 88.245 que han solicitado asilo en la Unión Europea, incluyendo 3.045 en el Reino Unido (*). Estos niños están especialmente en riesgo frente a traficantes de personas que se aprovechan de los viajeros vulnerables y pueden fácilmente tomar ventaja de ellos. Estos riesgos incluyen la vulnerabilidad a la violencia sexual, la explotación y la trata de personas. El futuro de los niños no acompañados en "La Selva" sigue siendo ignorado por las autoridades, que carecen de recursos financieros y voluntad política para ayudar a que estos niños reciban atención adecuada.

Se dijo que el cierre del campamento era permanente, pero a inicios del nuevo año hubo rumores de que una vez más los refugiados estaban estableciendo un campamento cerca y alrededor de la zona portuaria francesa. Según informes en la prensa británica, en el 2017 se han visto emerger 6 asentamientos en el área de Nord-Pas-de-Calais desde el cierre de "La Selva". Estos nuevos campamentos están cerca de las autopistas y los autoservicios, con muchos refugiados arriesgando sus vidas al intentar cruzar la frontera del Reino Unido, escondidos en la parte trasera de camiones y otros vehículos de gran tamaño. Es preocupante que la actividad del tipo de tráfico de pandillas se haga más grande en esta área, con traficantes de personas dirigidos a los refugiados en estos campamentos.

Aunque "La Selva" original parece inoperante por ahora, ello no ha detenido a estos campamentos más pequeños que emergen en las áreas circundantes, demostrando que los esfuerzos de los gobiernos francés y británico no han sido enteramente acertados. Hay miles de personas que viajan a Europa todos los días en busca de asilo y refugio. Se necesitan desesperadamente medidas correctivas y soluciones en toda la Unión Europea, incluyendo el Reino Unido. Todos los países necesitan permitir una mayor afluencia de refugiados, la mayoría de los cuales están huyendo de la persecución, las guerras civiles y las perspectivas de un futuro espantoso.

En conclusión, esta crisis humanitaria no desaparecerá simplemente haciendo la vista gorda e ignorando el problema; ahora es el momento de ayudar, para evitar que se desarrolle una tragedia mayor.

(*) Cifras extraídas de "Children in Crisis: Unaccompanied migrant children in the EU", informe publicado por la Cámara de los Lores, página 3.